El pasado mes de noviembre Miriam Nicolás, de ASSIDO, participó junto a su hermana Violeta en la Feria MARTE de Arte Contemporáneo en Castellón, ejecutando una performance creada por Violeta bajo el título «Cuando se cogen fuerzas. Ejercicios para no perderse»
Concepto
La acción está inspirada en la realidad no normativa de mi hermana, una persona con el síndrome de Down, que forma parte de un colectivo poco visible en la sociedad actual. El interés por la construcción de la identidad subyace en el fondo de la propuesta. Ella es deportista vocacional, esto contribuye a conformar su personalidad, de ahí que se tome el ejercicio como un referente en la configuración de la performance para poner de relieve el cuerpo. Asimismo, subrayamos cualidades físicas asociadas a su diversidad que se muestran con toda normalidad. Se hace uso de la misma máscara lo que parece igualarnos a las dos performers en una especie de identidad compartida, tenemos en cuenta que el término persona proviene del latín persona, y éste probablemente del etrusco phersu, ‘máscara del actor’ (el cual —según el Diccionario de la lengua española— procede del griego πρóσωπον [prósôpon]). Además se trata de un tipo de mascarilla de belleza que usan las mujeres, en una retórica de lo que se considera femenino. Está presente el vínculo con la madre -núcleo de origen común-,la satisfacción de ganar (la simbología de nuevo del deporte) en la medalla que ella nos da con el número «uno» como unidad y como primero, lo principal y antepuesto a todo, que integramos al comerlo, la metáfora comestible. El humor absurdo está presente y articula la propuesta en general.
Descripción de la acción
En primer lugar nos pondremos unas mascarillas faciales (productos de cuidado personal), a continuación haremos ejercicio levantando kilos de azúcar como si se tratara de pesas. Después, cada una abrirá alguno de los paquetes de azúcar y lo verterá en un decantador de vino, del que se pasará a otro vacío y luego se volverá a verter en el primero, repitiendo la acción en varias ocasiones y en distintas posiciones, de pie, sentada y en cuclillas, en distintos lugares de la sala. Nos teñiremos de azul las lenguas con una especie de piruleta, mostrando la lengua y deslizando el caramelo en movimientos repetitivos posicionándonos en distintos extremos de la sala. Cogeremos lupas y las colocaremos sobre cada lengua mirando hacia los espectadores, aproximándonos a ellos y moviéndonos alrededor de la sala. Luego tomaremos dos cuerdas y comenzaremos a hacer nudos para confeccionar una especie de red que nos cubrirá, excepto las cabezas. Por último, nuestra madre, sentada entre el público, nos dará una especie de pan redondo pequeño con el número «1» en relieve, sujetado con una cinta que mostrará a las personas presentes y nos colgará (algo similar a una medalla) y procederemos a comerlo.